
La obra de Degas refleja una perspectiva extremadamente personal y psicológica, hace resaltar lo pintoresco o se concentra en el detalle. Así, la pintura de este artista es a menudo discutida con relación al auge de la fotografía de exposición breve. Temáticamente, la naturaleza resultaba menos interesante para el pintor que la vida y los habitantes de la metrópolis moderna. A pesar de que Degas buscó sus temas fundamentalmente en los salones de ballet, en las carreras de caballos, en el circo o en dormitorios, las bailarinas siempre fueron el tema favorito de Degas.